Por Leslie Vanessa Ventura Hernández[1]

Según el nuevo informe del Banco Mundial señala que en América Latina se ha estancado el crecimiento y socavado el progreso, es menester indicar que en este importante informe que se publica en enero y junio, se examinan los acontecimientos, las perspectivas y las políticas de la economía a nivel mundial, haciendo hincapié en los mercados emergentes y las economías en desarrollo. América latina lamentablemente ha llegado a una coyuntura critica, ello constituye una preocupación que si bien en las últimas décadas ha logrado avances significativos en la estabilización económica, el bajo nivel de crecimiento, de manera sostenida, no es tan solo una estadística económica sino que representa una barrera para el desarrollo de la región, ya que se traducen en servicios públicos reducidos, menos oportunidades de empleo, salarios deprimidos, generando mayor pobreza y desigualdad.

Cuando las economías se estancan, el potencial de su gente se ve limitado, y qué hacer entonces para reactivar una economía competitiva en la región, para lograr capitalizar el progreso, sin duda se deben abordar desafíos de larga data. Las reformas en infraestructura, educación y comercio son fundamentales para mejorar la productividad y la integración al mundo. “una agenda que impulse el crecimiento aborda seriamente estas brechas, de lo contrario la región quedará estancada y no podrá atraer inversiones, ni aprovechar nuevas inversiones, ni aprovechar nuevas oportunidades, como la relocalización de industrias o la economía baja en carbono. La mejora de los sistemas de competencia debería ser parte de estas estrategias, lo que beneficiaría a los consumidores y las empresas”, dijo William Maloney, economista feje del Banco Mundial para América Latina y el Caribe. Sin duda fomentar la competencia es fundamental para reactivar la economía y recuperar la confianza de los inversores. Cuando la competencia se ve sustentada en políticas, instituciones y marcos sólidos, se motiva a las empresas a innovar, ser más eficientes y ofrecer avances tecnológicos, es por ello la importancia de mejorar la competitividad para que aliene la elevación de inversión, la adopción de nuevas tecnología y el apoyo a las empresas a ser más competitivas, es decir tener una mano de obra calificada, invertir en infraestructura y todo el apoyo que se da a la gerencia que tienen los países asiáticos, por ejemplo el caso de China cuando el mercado global se ve inundado de productos chinos artificialmente baratos, la viabilidad de las empresas estadounidenses y extrajeras se pone en duda y hemos visto esta historia antes, hace más de una década el apoyo masivo del gobierno de la República Popular de China condujo a un acero chino por debajo del costo que inundo el mercado global y diezmo industrias en todo el mundo, si bien China niega que se trate de subsidios y oficialmente dice que se trata de innovación, con China inundando de productos de buena calidad y a bajos precios a todo el mundo es prudente decirle a los países latinoamericanos que se habrán más a la competencia internacional, si bien es cierto hay una ventaja de tener productos importados más económicos ya que el consumidor se beneficia porque encuentra productos de buena calidad pero más baratos en cuanto a precios para consumir así se traten de subsidios, lamentablemente existen ciertas restricciones al libre comercio que están impidiendo que se consigan los beneficios para todos, entonces estamos en medio de una pugna entre las grandes potencias comerciales respecto a compartir el mercado y dejar de restringir el libre comercio en el mundo para así poder establecer una libre competencia y lograr que América Latina pueda tener una competitividad en sus productos ante los productos chinos y es que es innegable que en el área de carros eléctricos por ejemplo no tenemos ventaja comparativa en un mediano plazo pero en sectores emergentes como el petróleo y litio con los que si podríamos tener una industria competitiva mundialmente y ello representa un reto en el sentido de contar con trabajadores capacitados, una infraestructura adecuada y tecnología de punta, lamentablemente existen ciertos temas que representan una desafió tal como el problema de educación pública bastante atrasado comparado por ejemplo con Asia con el mismo Vietnam que es nuestro competidor para inversión extranjera. Lamentablemente se invierte muy poco en infraestructura y tememos sectores de sistema de innovación que no funciona muy bien, por ejemplo algunas universidades muy buenas pero muy costosas cuyos vínculos con el sector privado es de los peores del mundo es decir que no existe una buena comunicación en tener más técnicos, ingenieros y tecnología de punta para hacer una industria mucho más productiva, es importante tener un sistema más dinámico de innovación para aumentar la productividad y trabajar en todas las capacidades, es esencial para hacer una industria más productiva, es importante indicar que existe materia prima que sale de América Latina y que los precios se regulan mundialmente por ejemplo el petróleo y el litio siendo uno de los grandes temas que se está presentando precisamente por la demanda que hay respecto a estas materias primas, siendo China el principal comprador como el caso del cobre en Chile por nombrar alguno y que representan relaciones que se deben estimular ya que esos precios tan bajos son los que se deben regular para obtener una mayor economía.

Las realidades de los países en nuestra región se pueden dividir en dos primero los países que están siendo gobernados con una visión de economía de mercado con sentido social son los que de mejor desempeño tienen y los segundos los que están gobernados con populismo son lo que están no solamente perdiendo actividad económica y empobreciendo aún más a los necesitados y si bien puede que exista alguna correlación entre el populismo y el crecimiento económico, lo que sí es importante señalar es que existe un grupo de tareas en la que se debe de trabajar como los temas estructurales y de innovación, no hay una manera fácil de estimular un crecimiento económico en la región independientemente del gobierno que se encuentre de turno, pero todos tenemos los mismos problemas como región es decir más volatilidad política, más violencia y niveles muy bajos de educación.

El populismo es un tanto confuso y sería mejor medir a los gobiernos de América Latina si están combatiendo la pobreza o no, representaría  un mejor criterio por ejemplo en Brasil continúan con programas sociales muy importantes, aún en México las trasferencias a los más pobre continúan, esa es una perspectiva más productiva en el sentido de que el tema de la pobreza en América Latina sigue siendo el reto más grande que tiene la política económica en esta parte del mundo.

Al analizar que si bien en nuestra región no hay guerra, hay alimentos, hay presencia de materias primas tan importantes como el litio y el petróleo cómo se explica que según el informe del banco mundial América Latina se encuentra de último lugar prácticamente, incluyendo que Rusia le sobrepasa en crecimiento, siendo que su economía es la cuarta más grande del mundo y sigue creciendo, Rusia que se encuentra en una guerra en este momento, esto se deberá a la resiliencia de la economía rusa contra los efectos de las sanciones occidentales desde el inicio de la guerra de Ucrania, tiene que ver con la fortaleza relativa de la economía antes de que comenzara. Rusia supero a Japón y paso al cuarto lugar en el ranking mundial de países en términos de PIB en paridad de poder adquisitivo (PCI) realizado por el Banco Mundial. Es importante indicar que el informe compara las economías basándose en los resultados de 2021.

En América Latina no se ve esa tecnificación y diversificación de la industria y los sistemas de innovación en la región.

La entidad mundial de fomento atribuye a las amenazas combinadas del cambio climáticos; la fragilidad, los conflictos y la violencia o la inseguridad alimentaria por nombrar solo algunas, como las dificultades con las que tropieza la plena recuperación de todas las economías, así como el retroceso en los proceso de recuperación de pandemia y es que las cadenas de suministros se afectaron mucho y entre más distante las fuentes de abastecimiento más problemas, existía la idea de que América Latina pudiera absorber varias de estas nuevas inversiones, pero el informe emitido por el Banco Mundial revela que no hay tanta transferencia de inversión directa hacia América Latina, y esto es impresionante porque en el caso de México por ejemplo siendo el mayor exportador de Norteamérica y teniendo una posición privilegiada porque se encuentra al lado de Estados Unidos, siendo que ya es parte del tratado de libre comercio de América del Norte.

Además, pese a que muchos países de la región cuentan con agencias y leyes de competencia, su aplicación es débil, debido a que varias gerencias carecen de fondos o de personal suficiente. Las firmas poderosas suelen influir en las políticas gubernamentales, lo que reduce la eficacia de las leyes de competencia.

Todo esto crea un ciclo en el que un puñado de grandes empresas domina e influyen en los merados, y tiene muy pocos estímulos para innovar. Con bajos incentivos para sobresalir, empresas poco productivas permanecen en el negocio y terminan mal preparadas para competir, sofocando su potencial para impulsar el crecimiento. 

A la vez que exploran nuevas vías para revitalizar el crecimiento, los países deberían evitar la tentación de limitar la competencia lo que podría perpetuar el actual ciclo de baja productividad y crecimiento.

Para corregir los marcos de competencia y mejorar la posición de los países de la región en el mercado global, el informe sugiere áreas claves de acción, que incluyen: 

• Fortalecer las agencias de competencia. El informe contiene nueva evidencia de que las agencias nacionales de competencia efectivas tiene un impacto positivo en la productividad, las ventas y los salarios. Reforzar estas agencias incluye garantizar su independencia y hacer cumplir su capacidad para hacer cumplir las regulaciones antimonopolio y a favor de la competencia, especialmente para las empresas más grandes. Esto supone también promover prácticas efectivas de gestión pública y capacitar a funcionarios. 
• Apoyar las políticas de innovación. La competencia per se no es suficiente para que las empresas prosperen. Las empresas deben estar preparadas para una mayor competencia, tanto nacional como internacional. Esto requiere políticas complementarias que estimulen a las empresas a innovar y ascender en la escala tecnológica para que puedan competir, adoptar nuevas técnicas y crecer.  
• Potenciar la capacidad dirigencia. Mejorar los conocimientos de gestión ayudara a las empresas a responder a los mercados, identificar nuevas oportunidades, desarrollar planes de negocios y estimular a los trabajadores. Esto debería ir acompañado de una agenda para mejorar la educación en todos los niveles, preparando a los estudiantes y a la fuerza laboral para prosperar en entornos competitivos.[2]

Pareciera que la economía en la región está envejeciendo según el banco mundial, ya no es más aquella economía joven que muchos creía vibrante, siendo uno de los puntos principales de los factores de poco crecimiento que se debe a la baja tasa de nacimientos en la región, ya que constituye la fuente más importante de crecimiento y productividad, es la disponibilidad de mano de obra, si no hay mano de obra cómo se puede aumentar la productividad. Si bien el señalamiento muy acertado que realiza el informe del Banco Mundial, de dos temas muy importantes como lo son: la cuestión demográfica que indique anteriormente en cuanto a que nuestra economía está envejeciendo como también lo hacen las grandes economías avanzadas en todo el mundo y el tema de la seguridad en América latina que si bien es verdad que la mayor parte de las personas considera la economía de mayor prioridad después de esta le sigue el tema de la seguridad que están muy bien señalados en el informe ya que este tema es clave, es menester señalar que la tasa de homicidios en nuestra región es diez veces más alto que Asia y cinco veces más alto que en Norteamérica ya que genera cierta incertidumbre por lo que constituye una barrera para atraer mayor inversión extranjera, otro tema también a tratar es la desigualdad que existe y que ya mencionamos al respecto, todos estos temas se deben combatir si se quiere primero por el bien de las personas y máxime si se quiere estimular la inversión de cualquier índole.

El panorama en América Latina como lo señala el informe emitido por el Banco Mundial no es muy positivo en las circunstancias actuales a pesar de que la salida de la pandemia ha sido impresionante para los países latinoamericanos, si bien la situación es preocupante tenemos que enfocarnos a mediano y largo plazo, es necesario tener una visión correcta de dónde queremos estar en un lapso de cinco a diez años para obtener una taza de crecimiento del cuatro por ciento por ejemplo, no hay que enfocarnos tanto en el uno coma seis por cierto actuales, esas cifras vienen y van lo realmente importante es realizar las reformas necesarias y acertadas teniendo en cuenta la creación de modelos de desarrollo efectivos para lograr reactivar la economía competitiva de la región, ello representa trabajar arduamente en la modernización e innovación mediante la creación de productos que tengan mayor demanda en mercado global.

[1] Licenciada en Ciencias Jurídicas y sociales, Universidad Rafael Landívar, Guatemala.

[2] Página web: www.worldbank.org/lac