La revista es uno de los medios de comunicación más antiguos, y que más ha evolucionado a lo largo de la historia. Previo a su aparición tuvo lugar un invento que revolucionó todo lo relativo a la  comunicación, y divulgación del conocimiento, este invento revolucionario fue la imprenta en el año 1440. A partir de este hito, tuvieron que pasar dos siglos para la llegada de  la primera revista en el año 1663, y dos años más para  la primera de carácter científico en el  año 1665.

Conocer la historia y el desarrollo de las revistas concebidas como nuestra Revista Iberoamericana de Derecho Cultura y Ambiente o RIDCA, es también, comprender la importancia de los flujos de información y cómo éstos han ido evolucionando y multiplicándose exponencialmente. El rol principal de los espacios académicos como nuestra Revista radica en la difusión del conocimiento. A partir de esta premisa, y gracias a la gran convocatoria, y fundamentalmente a la pluralidad de la misma, nuestra revista se ha posicionado como un sitio de consulta dinámico y en expansión.

De cara a un futuro que nos desafía constantemente  a ser transigentes en la búsqueda de soluciones a retos que en un pasado resultaban impensados, ámbitos como nuestra revista, conforman valiosas herramientas a las que recurrir y en la conformación nuevos conocimientos.

La diversidad temática y de voces, la interdisciplinariedad en los enfoques y la transversalidad regional se ha afianzado como fortaleza, y ello ha sido posible gracias a la participación de los autores que nos acompañan.

Al cerrar este quinto número, agradecemos e instamos a la comunidad de AIDCA y de la Revista Iberoamericana de Derecho, Cultura y Ambiente, RIDCA a seguir afianzando el estimable espacio que con el aporte de todos y cada uno hemos cimentado.