Por Damián Ariel Rizzo[1]

I.- INTRODUCCIÓN

La Argentina reivindica soberanía sobre el Sector Antártico Argentino, comprendido entre los meridianos 25° y 74° de longitud Oeste al sur del paralelo de 60° de latitud Sur, con fundamento en títulos históricos, geográficos, geológicos y jurídicos.

Para ello, nuestro país cuenta en la actualidad con 13 bases en el continente antártico, de las cuales 7 son permanentes y 6 transitorias. Estas últimas se abren solamente durante la Campaña Antártica de Verano (CAV), de diciembre a marzo aproximadamente.

Tanto en unas como en otras, se desarrolla una importante cantidad de actividades científicas, las cuales se encuentran plasmadas en el Plan Anual Antártico (PAA) publicado anualmente por el Instituto Antártico Argentino (IAA) dependiente de la Dirección Nacional del Antártico (DNA).

En este sentido, la Dirección Nacional del Antártico tiene a su cargo el diseño y coordinación de la ejecución de la actividad argentina en la Antártida, cuyo eje es la ciencia, y en este trabajo trataremos de mostrar cómo se organiza y ejecuta la actividad científica en nuestras Bases, todo ello ajustado al marco legal establecido por el Sistema del Tratado Antártico.

II.- DESARROLLO

La actividad científica en nuestras Bases Antárticas, establecida y regulada por el Plan Anual Antártico, se divide en cuatro grandes grupos:

1. Actividades científico técnicas
2. Actividades de gestión ambiental
3. Actividades de apoyo logístico
4. Actividades de servicio

Para realizar estas actividades, se despliega desde el continente americano, un sinnúmero de personal científico especialista en distintas ramas de la ciencia, los cuales trabajaran en bases, refugios, campamentos e incluso a bordo del Rompehielos Almirante Irizar tanto durante la CAV como así también a lo largo de toda la Campaña Antártica de Invierno (CAI).

Asimismo, muchos de los proyectos científicos se llevan a cabo en cooperación con Programas Antárticos extranjeros, lo que incluye la participación de investigadores de diversos países en las actividades científicas de la Argentina en la Antártida.

Panorama legal

La Dirección Nacional del Antártico genera documentos especiales que permiten al grupo de científicos realizar sus actividades dentro de la normativa legal.

Es así que el personal desplegado, posee autorización escrita para efectuar actividades particulares y especialmente detalladas en ese permiso.

Todo esto se rige por la ley 25.743 de Protección del Patrimonio Arqueológico y Paleontológico y en algunos casos también por la Disposición 9 “T”/2015 de Repositorio Antártico de Colecciones Paleontológicas y Geológicas del Instituto Antártico Argentino.

En estos permisos se detalla, entre otros aspectos:

• Grupo de trabajo
• Vigencia del permiso
• Cantidad y tipos de elementos a recolectar
• Personal autorizado
• Lugar de trabajo

Inicio del proceso

Cuando se determina la necesidad u oportunidad de realizar un estudio científico puntual, en una rama de la ciencia determinada, se presenta un Formulario de Evaluación Ambiental Preliminar de Actividades Antárticas (FEAMB), donde consta que tipo de actividad científica se realizara y los permisos que se necesitan. Este documento lo genera el responsable del Grupo de Trabajo y es presentado ante el Instituto Antártico Argentino.

A partir de esto, la DNA, a través del Programa de Gestión Ambiental y Turismo (PGAyT),realiza una Evaluación de Impacto Ambiental de la actividad requerida y autoriza o no la realización de dicha actividad, generando así la autorización correspondiente en formato de “Permiso” o “Declaración Jurada”.

Este documento acompañara al grupo de científicos que realice la tarea y será el documento que avale su permanencia y el trabajo que están llevando a cabo en el terreno.

Para la realización de los trabajos de campo, el personal científico al generar el FEAMB, deberá especificar qué tipo de permisos necesitan, de acuerdo al trabajo a realizar. Estos permisos son los que evaluara la DNA para su autorización y pueden ser:

• Para utilización de sustancias radioactivas
• Para toma de muestras biológicas
• Para toma e intromisión perjudicial sobre flora y fauna
• Para introducción de especies no nativas
• Para introducción de pesticidas
• De ingreso a Zonas Antárticas Especialmente Protegidas (ZAEP´s)
• De recolección de elementos naturales no vivos
• De uso de vehículo aéreo no tripulado (VANT) o drones
• De uso de sustancias químicas

Otro aspecto a tener en cuenta, es la toma de muestras para su posterior análisis en el continente americano. Para la recolección de elementos se deberá detallar:

• Tipo
• Cantidad
• Propósito
• Lugar de recolección

Estas muestras serán recepcionadas en el Repositorio Antártico de Colecciones Paleontológicas y Geológicas del Instituto Antártico Argentino. Allíse depositan todos aquellos restos paleontológicos y muestras geológicas (fósiles y rocas) recolectadas en el continente antártico durante el desarrollo de las actividades científicas organizadas por el  IAA con el fin de proceder a su guarda y catalogación. Todo ello con el fin de preservar, proteger y tutelar al Patrimonio Paleontológico, como asítambién apunta al  aprovechamiento científico y cultural del mismo.

Para la toma y remisión de muestras se procede de acuerdo a la siguiente normativa legal:

• Ley provincial N° 370 – REGIMEN DEL PATRIMONIO CULTURAL Y PALEONTOLOGICO PROVINCIAL (1997). Artículo 1° – Es fin de esta Ley la protección, conservación, restauración y acrecentamiento del patrimonio cultural y paleontológico del territorio de la Provincia de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur, el que se regirá por la presente Ley y su reglamentación.

Artículo 2° – De acuerdo a la presente, el patrimonio cultural y paleontológico de la Provincia, reconoce y comprende las siguientes categorías: I – Bienes arqueológicos; II – Bienes paleontológicos; III – Bienes históricos y arquitectónicos; IV – Bienes artísticos y Artesanales.

http://www.legistdf.gob.ar/lp/leyes/Provinciales/LEYP370.pdf

• Tratado Antártico y su sistema – Protocolo de Madrid – Anexo II Conservación de la Fauna y Flora Antárticas (1998).

Recolección de Elementos Naturales No Vivos (meteoritos, fósiles, muestras minerales y restos de animales muertos, entre otros).

La recolección no autorizada de fósiles y material arqueológico está prohibida por la Ley Nacional 25.743. El IAA implementa las medidas establecidas por la Ley y posee un repositorio en el cual se ingresan todas las muestras de este tipo, obtenidas por los investigadores en el terreno. Desde el PGAyT, en Coordinación con el área Repositorio del IAA, se encuentra implementada una Declaración Jurada de conocimiento de las normas vigentes, en donde los investigadores declaran el tipo de muestras que retirarán de la Antártida y su compromiso de ingresarlas al repositorio.

Importancia de Base Marambio

La isla Marambio está compuesta por rocas que datan principalmente del Cretácico Superior al Eoceno. Ha sido referida como la “Piedra de Rosetta” de la paleontología antártica, debido a la incomparable visión que proporciona a la historia geológica y paleontológica del continente.

En el extremo norte de la isla se encuentra la Base Marambio, que al ser la única Base Antártica Argentina que cuenta con un aeródromo público controlado (denominado Aeródromo Marambio) permite el arribo y partida de un importante número de científicos y mantiene el nexo con el continente americano a lo largo de todo el año. Es la víamás rápida para el movimiento de personal entre continentes permitiendo agilizar los tiempos de trabajo y permanencia en los sectores de estudio.

Desde esta Base, el personal es redesplegado, también vía aérea, mediante el empleo de dos helicópteros Bell 212 pertenecientes a la VII Brigada Aérea de la Fuerza Aérea Argentina.

Por lo general, los traslados hacia y desde los refugios y campamentos, requieren de varios vuelos de ambas máquinas, dada la cantidad de equipos y personal que se debe transportar. Todo esto con un importante condicionante, el cambiante clima antártico. Como todo medio aéreo, lo helicópteros de la base están sujetos a las condiciones meteorológicas adecuadas que permitan operar de forma segura. Es por eso que el Centro Meteorológico

Antártico Marambio (CMAM) dependiente del Servicio Meteorológico Nacional (SMN) brinda permanente información del estado del tiempo y realiza los pronósticos que los pilotos y tripulaciones necesitan para planificar los vuelos.

Las oficinas del CMAM están ubicadas en el edificio principal de la Base y cuenta con un grupo de pronosticadores, observadores y personal científico que, ayudados por el equipamiento disponible y la información recabada desde otras Bases Antárticas, tienen la posibilidad de evaluar la situación actual y futura con una precisión admirable, fundamental para operar en estas latitudes con un clima tan extremo y cambiante.

También en la Base, contamos con el depósito de la DNA denominado Omega, en el cual se organiza, prepara y distribuye, toda la logística necesaria para el despliegue del personal hacia los refugios y campamentos. Mediante una coordinación precisa y oportuna entre ambos continentes, el personal que arriba a la Base dispone de todo lo necesario para el redespliegue en forma inmediata, a fin de optimizar los tiempos de trabajo en el terreno. Esta preparación incluye:

• Generador
• Agua
• Alimentos
• Combustible
• Cocina de campaña
• Gas
• Carpas

Para tener una idea de la cantidad de estudios científicos realizados durante una Campaña de Verano, procederemos a describir algunos de los que se realizan de acuerdo a las distintas ramas de la ciencia que se trate.

Es así que dentro de los trabajos llevados a cabo por personal del Servicio Meteorológico Nacional, algunos de ellos no solo en la CAV sino durante todo el año, podemos encontrar:

• Estudios de magnetosfera
• Medición del ozono
• Estudios de radiación cósmica
• Observaciones meteorológicas de superficie
• Geomagnetismo
• Medición de aerosoles y hollín

Asimismo, dentro de las ramas de la ciencia estudiadas por científicos y técnicos de la DNA, se realizan entre otros:

• Micropaleontologia
• Geología
• Glaciología
• Geomorfología y geología glaciar
• Paleogeografía
• Eco fisiología
• Estudio de paleovertebrados
• Monitoreo de ecosistemas

Para llevar a cabo la logística necesaria para la realización de todas estas actividades, la Base Marambio ve triplicada su dotación normal de personal durante la CAV, teniendo en cuenta todo el personal en tránsito que se encuentra en la Base, esperando ser desplegado hacia algún campamento o refugio, ser embarcado en el rompehielos o ser replegado al continente americano por nuestros C-130 Hércules.

Es por esto que la logística necesaria para mantener operativa la Base Marambio, es significativamente superior a la de las otras Bases Antárticas. Ya el simple hecho de ser la única que cuenta con un aeródromo implica tener la infraestructura y servicios necesarios para la actividad de apoyo al vuelo, que otras no tienen.

Por ejemplo servicio de autobomba para lucha contraincendio en aeronaves, terminal de cargas y pasajeros, personal especializado en carga y despacho de aeronaves, torre de vuelo con personal de control de tráfico aéreo, maquinaria vial para mantenimiento de pista y equipamiento de ayudas a la navegación (VOR, ILS, balizamiento de pista).

Si bien esta logística se ve facilitada por el hecho de disponer de un aeródromo,el grueso de los insumos necesarios para el funcionamiento de la base es transportado por el buque rompehielos. Al estar la Base ubicada sobre una meseta a unos 200 metros de altura sobre el nivel del mar, la descarga del buque se realiza indefectiblemente mediante los helicópteros embarcados que posee el mismo.

Existen cuatro grandes grupos de carga que se reciben del buque:

• Gas oil antártico (GOA)
• Combustible para aeronaves (JP-1)
• Carga frigorizada
• Carga a granel

La capacidad de almacenamiento de GOA dela Base es de 800.000 litros, en cisternas de 20.000 litros cada una. Durante el proceso de descarga se abastecen unos 600.000 litros, lo cual implica unos 400 vuelos del helicóptero desde el buque hacia la Base. Con esto tenemos un panorama de la magnitud de la operación.

Es así que tanto hombres como mujeres, científicos, militares y civiles, argentinos y extranjeros, forman parte de un gran proceso, que se inicia con la planificación el diseño y coordinación de la ejecución de la actividad argentina en la Antártida, a cargo de la Dirección Nacional del Antártico.

El Tratado Antártico y su Sistema erigen a la ciencia en el centro de la actividad antártica, y es así que nuestros científicos, junto con todo el personal que colabora con la logística, trabajan juntos para lograr una mayor eficacia de la presencia argentina en la Antártida sobre la base de la ciencia y la capacidad de prestar a otros países los servicios y conocimientos necesarios para facilitar sus tareas antárticas.

III.- CONCLUSIÓN

Este año la Argentina cumple 120 años de permanencia ininterrumpida en el continente antártico, la cual estuvo acompañada en todo momento por actividades científicas de todo tipo.

Los medios materiales y personales de nuestras fuerzas armadas colaboran permanentemente con esta actividad, brindando la logística necesaria para el despliegue del personal y sus equipos hacia los lugares de trabajo establecidos y plasmados en el Plan Anual Antártico.

Nuestra Política Antártica Nacional (PAN) busca fortalecer el Sistema del Tratado Antártico, y acrecentar la influencia de la Argentina en la toma de decisiones en los foros antárticos; además de promover la protección del medio ambiente antártico, la conservación de los recursos vivos marinos y de los recursos minerales

Antes de realizar cualquier actividad científica, es esencial que se considere y defina claramente el alcance de la actividad prevista, lo que incluye el área que cubre, y la duración e intensidad de la actividad.

Es gracias a todos estos trabajos, realizados por hombres y mujeres con vocación de servicio, pertenencia y deseos de acrecentar los derechos de soberanía que reclama nuestro país sobre nuestro querido sector antártico argentino, es que podemos seguir sumando justificaciones a las ya planteadas contigüidad geográfica (cercanía con nuestro territorio americano) y continuidad geológica (la cordillera de los andes a la altura del archipiélago fueguino se sumerge y reaparece en la superficie a lo largo del arco de islas conocido como las Antillas del Sur y, finalmente, en la península antártica) para nuestros reclamos e soberanía en el sector.

Es de gran importancia continuar con las actividades científicas en la región, y para ello es fundamental colaborar con la logística y el apoyo que sirva a nuestros hombres y mujeres de ciencia a realizar sus estudios, los cuales justifican nuestra permanencia en la península y sirven al reconocimiento internacional por los aportes realizados al conocimiento y exploración del continente antártico.

BIBLIOGRAFÍA

1. Página web de la Fundación Marambio (https://www.marambio.aq/).
2. Página web del Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto (https://cancilleria.gob.ar/es/iniciativas/dna/antartida-argentina).
3. “Guía para la protección del patrimonio paleontológico antártico” – Programa de Gestión Ambiental y Turismo – Dirección Nacional del Antártico.
4. “Regulaciones y procedimientos asociados al cumplimiento de la Ley 25.743 de protección del patrimonio arqueológico y paleontológico” – Cecilia R. Amenábar y Agustín Cúparo – Instituto Antártico Argentino – 2022.
5. Programa Antártico Argentino – Plan Anual Antártico 2023-2024.   

 Citas

[1]Jefe de Base Antártica Conjunta Marambio, Sector Antártico Argentino, Campaña 2024-2025. Diplomado en Derecho Antártico, Gestión y Logística Antártica Ambiental (UM – AIDCA – COCOANTAR)