Revista Iberoamericana de Derecho, Cultura y Ambiente
RIDCA - Edición Nº3 - Filosofía del Derecho
Carlos Vera Bordaberry Zalazar. Director
15 de julio de 2023
El Amor en la gerencia pública desde el hacer del Fiscal ¿Garantía de un actuar humano?
Autora.María Alejandra Mancebo. Venezuela
Por María Alejandra Mancebo[1]
´´No se muera vuestra merced, señor mío, sino tome mi consejo y viva muchos años, porque la mayor locura que puede hacer un hombreen esta vida es dejarse morir sin más ni más, sin que nadie le mate ni otras manos le acaben que las de la melancolía Mire no sea perezoso, sino levántese de esa cama, y vámonos al campo vestidos de pastores, como tenemos concertado: quizá tras de alguna mata hallaremos a la señora doña Dulcinea…´´
. (Segunda Parte de «El ingenioso hidalgo Don Quijote» Capítulo LXXIV
A modo de preludio
Cuando decidí iniciar a profundizar sobre cómo abordar el amor el amor en la Gerencia Pública y relacionarlos con el liderazgo en la justicia y así hacer entender que todos radica el hombre y al debemos volver, el solo nombre ya parecía una tarea ardua o idealista y pensé ¿cómo expresará en líneas, años de vivencia gerencial en la administración pública?, ¿cómo narrar el sentir de un líder que representa al Estado en su hacer?
Ante lo mencionado, es propicio hacer saber que el discurso está inspirado en Don Quijote de la Mancha fundamentada en la analogía de algunas escenas y personajes causada en el brío de justicia del Quijote y sus aventuras, develado lo anterior, es de notar que las instituciones que administren justicia demandan gerentes que giren su accionar en pro de la misión y visión de la institución donde labora; ese gerente más allá de conducir debe saber liderar considerando las demandas que se observan en la sociedad.
Este ensayo versa en la gerencia pública pues es en ella donde se cavila sobre quién es y cómo actúa ese líder con significado en el amor por la justicia y su impacto en un Estado Socia de Derecho y Justicia
As a prelude
When I decided to start delving into how to approach love in Public Management and relate it to leadership in justice and thus make it understood that all lies in man and we must return to it, the mere name already seemed like an arduous or idealistic task and I thought How will you express in lines, years of managerial experience in public administration? How to narrate the feelings of a leader who represents the State in his actions?
Given the aforementioned, it is propitious to make it known that the speech is inspired by Don Quixote de la Mancha based on the analogy of some scenes and characters caused by the brio of justice of Don Quixote and his adventures, revealed the above, it is noteworthy that the institutions Those who administer justice demand managers who turn their actions in favor of the mission and vision of the institution where they work; that manager, beyond driving, must know how to lead considering the demands that are observed in society.
This essay deals with public management, since it is in it that one reflects on who he is and how this leader acts with meaning in the love for justice and its impact on a Social State of Law and Justice.
Postura
El accionar del fiscal o titular de la representación fiscal en la gerencia pública deviene del cumplimiento de la ley, acontece de la norma, es decir, es una figura que representa un papel fundamental ya que es el responsable de que las víctimas permanezcan o no en el proceso Conforme a ello, se colige que al fiscal como líder público se le prepara y se le exige actuar conforme a las normas, ese imperativo de acuerdo a la experiencia y mi visión conlleva a que, se visualice al fiscal de autoritario, sumiso, injusto y hasta poco humano, no obstante, los fiscales saben, como, que tal acatamiento los protege de una acción ilegal.
Pero ese blindaje, ¿es garantía de un actuar humano?, ¿o se requiere de otro aspecto que acompañe la ley? Esa interrogante que se hacen cada uno y los actores se soporta en Behn (1998 ciatado por) Beneyto, J. (2011). Teoría Universal del Humanismo. Consultado el, la maravillosa fuente del poder burocrático reside en la habilidad de la burocracia de resistirse a ejercer iniciativa, de ocultarse hábilmente detrás de una norma… (p.154) Pese a lo destacado, desde la experiencia vivencial Un fiscal debe actuar como un servidor público, es decir, generar una contribución social con su trabajo, actuando con la sensibilidad que se debe tener cuando se trabaja con seres humanos, pero apegado a las leyes y a las funciones propias del cargo .
Pon tanto, el fiscal no debe creer que por cumplir la ley es líder en la nueva gerencia publica, la humana; de allí que es perentorio aprender a ver la gestión pública más allá de la rigidez del derecho administrativo que para los abogados es la manera de legitimar ese accionar, pese a ello las experiencias de los actores demandan otra visión donde el fiscal aprenda a gerenciar lo público desde lo humano y, lo humano es desde el amor. Tal como lo vivenciado es quien es capaz de empatizar frente a la gente, que procura una verdad y una justicia sin igual Ante lo rememorado, emerge la premura de no olvidar el amor por el derecho y la valentía de fiscal de enfrentar los molinos de viento.
Los molinos de viento tan famosos como el Quijote, se hacen presente ante el hacer de un fiscal que demanda el amor para liderar en la gerencia pública; pese a ello, antes de definir la postura del amor como teoría, de acuerdo, es necesario hacer mención a los molinos que también los fiscales enfrentan.
El lector, ustedes, mi persona, de alguna manera al hacer mención al Hidalgo recuerdan a este caballero cuando en una de sus aventuras ataca a lo que él cree un gigante pese a la advertencia de su amigo Sancho, hace caso omiso y es derrocado por los molinos de viento. Sobre este pasaje del primer libro existen muchas interpretaciones, lo cual demuestra a bondad de la obra que inspiró la investigación, siguiendo esa amplitud expuesta más allá de lo hermoso e imponente de imaginar al Hidalgo enfrentar uno molinos creyendo ser gigantes, permite comprender el discurso de los actores sociales respecto a saber que se debe cumplir la ley ya que la misma será el escudo, no obstante ésta es insuficiente ante una gestión humana en un accionar que garantiza los derechos de los ciudadanos. En este sentido, resulta contradictorio que el fiscal en su accionar para ser líder público del amor deba ser querido por unos y por otros solo respetado, avistando que tal respeto es temor, pero se entiende tal percepción desde la experiencia si lo asemejamos a la existencia de molinos de viento, pues, aunque este sea una escena de un libro no significa que Don Quijote no luchó contra otros molinos en el libro segundo, cuando sin la envestidura de la armadura pero si transformado en más humano al aceptar que no se necesita tener un caballo para hacer lo correcto pero sí equilibrar quien es; así pues, molinos.
Según las vivencias que logre sentir e interpretar, es el miedo que siente el fiscal de saber que la ley no es suficiente ante el rol que deben cumplir, es también representar el Estado sin tener conocimientos, es creer que el imperio de la norma te impide ser compasivo y bondadoso o confundirlo con debilidad, es el poder sin responsabilidad, la inseguridad ante no creer en lo que se hace, la apatía con desidia, el no saber equilibrar la razón con el corazón; en fin, ser persona sin saber manejar desde los valores lo que somos y hacemos.
Si, el fiscal en su hacer en la gerencia pública enfrenta molinos como bien lo confirma sin presunciones de poder o de beneficios, cargo personas, ordenes, emociones reales o imaginarias pero presentes, que deben ser enfrentadas; el logro ante los molinos es el quién sea el fiscal, es decir, si ese fiscal cumple con su función con visión humana, es insistir, sin duda querido lector, en el hacer humano del fiscal para liderar en la gerencia pública y la respuesta es el amor ¿pero, como debe ser?, ¿qué cualidades hacen falta?
En ese sentido, el fiscal como gerente público al liderar dado su función, requiere una forma de hacerlo que conforme a lo que se deslumbra de los actores resulta de su condición humana, pero también en su visión humanista, de allí que la interacción de la comunicación se sume a esta la introversión. Innegablemente, las emociones rigen el actuar del fiscal, siendo a su vez motivación en su hacer. De acuerdo con lo narrado, esas emociones se valen del lenguaje, lo que emerge de la necesidad de precisar quién es y cómo es el fiscal como líder del amor.
Desde la perspectiva antes hilvanada, brota la relevancia del fiscal como líder de amor, y bajo las voces de actores mucho tiene que ver con: ¿quién es? y ¿cómo es?, esto conforme a la visión humana y en consideración al entorno, el servicio hacia el otro, la integridad como presupuesto de la justicia. En otras palabras, despierta al amor, como la mejor forma de cooperación mutua. Sobre la base de la aserción antes alusiva, apunto las particularidades de este servidor.
En efecto del libro de Don Quijote de la Mancha, en sus dos partes se reconoce la esencia de sus personajes desde sus accionar hasta el sentir. Por consiguiente, tomando en cuenta el fenómeno que hoy es el Ministerio Público como garante de la legalidad y titular de la acción penal con base al respeto de los derechos humanos del colectivo, y la obra de Cervantes, que marca a los personajes en valores que bien se infiere además de la pluma del maestro un reflejo de lo que este padeció como consecuencia de una justicia no justa de la época, permiten presentar estas particularidades evocando el inicio.
Visto por lo que emergió donde convergen los valores que instituyen al hombre, pues querido lector tome notas de los atributos del fiscal soportado en lo aventuras del hidalgo y su escudero, relación que se convirtió en amistad y que desde una postura particular un tributo que resaltar. Dentro de este contexto, los valores son retos de cada fiscal pero, también un compromiso de vida en tanto lo que apopo en Ortiz, (1999) la afabilidad humana es el enunciado más preciso del amor, ese amor que busca estar atado al respeto.
Su particularidad medular es ser amante de la ley, siendo así es de mencionar sobre ese fiscal el fiscal debe: cumplir las leyes, que exista debido proceso, la protección de las víctimas, velar por el trato correcto a la persona que está siendo imputada y que se realicen adecuadamente los actos de investigación, recolección y evacuación de las pruebas. Suena fácil y sencillo, pero es lo más complejo, claro.
Esta aseveración es la función principal del fiscal, lo que exige para la certeza de que se logre ante lo ya explicado que no basta la ley o que esta ley sea el escudo de actuar sin justicia. Interpretando a los actores, se aduce que más que un fiscal positivista se necesita un fiscal líder, que sienta, ante ello desde la comprensión de los actores con el agregados de mi percepción esta función medular para ser ejecutada desde el amor requiere como otras particularidades del fiscal como : La Lealtad, Probidad y humildad
El fiscal líder del es ´´es una figura que representa un papel … es el responsable de que las víctimas permanezcan o no en el proceso Para poder lograrlo el fiscal además de conocer el derecho, las leyes, las normas es un hombre probo pues su accionar es integro, caracterizado por la armonía del hacer, ser y sentir, también es leal el como persona pues conoce su identidad y leal a quien representa, que no es al Gobierno, sino al Estado.
Esa lealtad es tratada, según lo descifro de los actores, como un valor donde se cuida de manera compasiva en quién se cree, y el fiscal tal como se discurre profesa la ley y la justicia, tal como lo asevera alguien responsable, confiable, honesto y comprometido con su cargo´´ Este valor, es de destacar pues en la función pública se confunde con ser parte der una fila política y puede que ello es lo que haya impedido su fortaleza en la gerencia pública, tal como lo particulariza en aquellos que dependen de ti puedes cuidar, valorar, respetar, delegar en ellos y reconocerlos
Todo esto apoyado en la humildad, pues un líder que no es capaz de reconocer al otro no gestiona desde el amor, como lo apunta Don Quijote ´´ sin protagonismos y menos individualidades, reconociendo el valor que tienen todas las personas Un líder del amor concibe su accionar sin soberbia ni prepotencia, y aunque pareciera difícil ante los estragos del poder mal ejercido, entendí del sentir de los actores que este valor es la base del amor, pues solo con la humildad somos capaces de vernos como somos, de reconocernos y de aceptar al otro, pues el liderazgo no se trata de personas perfectas, sino que trata de seres humanos
De igual modo, desde lo develado la valentía, la gentileza y la autenticidad, que se aprecian de igual forma que los primeros en la obra de 1615 y que hoy 2023 Debe ser educado, amable, respetuoso y coherente es decir, un líder público con coraje propio de la función que se demanda pero con la gentileza que lo hace amable, un hombre capaz de distinguir sentimientos de él y de los otros, pues su hacer es para el hombre sin perder la identidad ni la coherencia en su andar.
En este panorama epistémico, al reflexionar sobre la acción humana del fiscal como líder del amor, emergió el amar ser fiscal que se representa en la vocación de servicio, Asimismo, el líder del amor inspira en su accionar y es estratega, porque es capaz de inspirar confianza, idealizador, creador y ejecutor de estrategias forma, son cónsonos al exigir del fiscal líder que conquiste en su hacer y siendo a la gestión pública un servicio, el ser estratega humano que motiva y respalda el accionar de solicitar la restricción de derechos unos para garantizar los derechos de las demás.
Interpreto pues que, la ética de líder público del amor está interconectada con otros valores que se precisan del fiscal, integridad, responsabilidad, compromiso que se erige de la necesidad evidente de la convivencia y del accionar desde lo correcto y lo sobre lo que deben hacer con soporte en el bien.
En armonía con lo dispuesto anteriormente, ese fiscal debe ser justo acompañado de la bondad y compasión, logré valorar lo dispuesto desde la agudeza del relato de cada actor, de recordar sus gestos y emociones pudiendo al respecto recalcar justos y honestos que hagan su labor como corresponde según la ley y sus conocimientos, por ende, serlo significa dar a cada quien lo que le corresponde, vivir honestamente y no hacer daño a nadie. A tenor de lo descrito lo justo según Cortina (1996) citado por Córdobas:
“aquello que cualquier ser racional que no se deje llevar por sus intereses individuales o grupales sino por intereses universales tiene por justo” (p.117).
Siendo así, se comprende que la justicia se relaciona con los derechos humanos y su comprensión tiene que ver con la ética, por tanto exigible y para lograr esto, el fiscal deber ser bondadoso y compasivo, capaz de estar y sentir empatía por el otro sin que le impida hacer su trabajo; ser titular de la acción penal, interpreto con ello que, aun solicitando una privativa de libertad a una persona no deseo su mal, sino por lo contrario desde el accionar justo es el bien que se requiere, o de manera contraria ser capaz de no señalar como culpable a quien no lo es aunque el colectivo lo aclame ello, basado en lo que corresponde que es hacer el bien y la forma de hacerlo es desde el amor , lo que nos genera la pregunta: ¿cómo es el amor en la gerencia pública?
Este distintivo se siente en los personajes de Cervantes que engrandece la obra y, sin duda, hacen eco en los actores que lo demandan.
Durante toda la historia de la humanidad se han desarrollado muchos temas, sin embargo, hay uno en específico que es parte del objeto de esta investigación, así como múltiples explicaciones y experimentación de científicos, poetas, escritores, actores sociales y ustedes lectores: el amor. Hablar de amor suele tener un tono romántico, sin duda es la forma más común que los seres humanos le otorgamos, aunque el amor existe naturalmente en todas las relaciones humanas, sean románticas o no. Comulgando con las ideas de Maturana (ob.cit) podría decir como él que los seres humanos somos intrínsecamente amorosos; el amor es parte de nosotros y de la vida misma.
En ese orden de ideas López citado Lynn, L (1996) al hacer de una comprensión sobre la noción de amor Maturana manifiesta que más que un concepto que se le quiera dar significado es o se exterioriza en el respeto al otro y a ese otro en sus relaciones sociales y destaca lo cual comparto que el amor es una emoción que pone a prueba la conducta racional del hombre, que también es reconocer la singularidad del otro y entender sus necesidades
Siendo así, podría decir, desentrañando los actores con base en Maturana y en mi postura, que amar es, en primera instancia, reconocer al otro como otro. Ahora bien, del discurso de los actores pude comprender que el amor no puede ser únicamente este reconocimiento de la otra persona como ser válido. ¿Acaso ese fenómeno del que se ha hablado en libros, poemas, canciones; del que han hecho películas y obras de teatro; ese fenómeno que hasta la ciencia ha decidido que vale la pena estudiar; ¿aquello por lo que algunos han iniciado guerras y otros han dado su vida, puede ser definido tan fácilmente? El amor es mucho más complejo que eso desde los actores, pero tiene su inicio en esa validación de otro ser como humano.
De tal forma, así como la dignidad es algo intrínseco del ser humano, el amor es parte de cada uno desde antes del nacimiento. Tal como Maturana (Ob.cit) afirma, el amor es una emoción y es ésta misma la que dicta el actuar de forma inteligente de cada ser humano. Es a través de esta emoción que podemos coordinar nuestras acciones con las acciones de los otros, entendiendo que sólo así es posible la aceptación mutua, el respeto y por supuesto, la sana convivencia.
Como los seres humanos somos seres naturalmente amorosos compartiendo el pensar de Maturana y de los actores , cuando somos expuestos a ambientes donde no se vive el amor, las consecuencias son fenómenos de ansiedad, depresión, problemas psiquiátricos e incluso la muerte; que se asemeja a los molinos que enfrenta los fiscales o si por el contrario somos expuestos a ambientes amorosos, las consecuencias son personas que se reconocen a sí mismos y por lo tanto fácilmente reconocen al otro, es así como se construye una sociedad donde la aceptación, la armonía y la paz reinen.,
Siendo así solo cuando el fiscal es capaz de entender que su hacer representa la ley en pro del colectivo su accionar demanda una percepción humana que conlleva a que este se conozca así mismo, se reconozca se sepa digno, se valore y se respete podrá entender al otro y actuar con amor, pues sólo quien se ama así mismo es capaz de amar a otro.
Desde la perspectiva antes planteada, es el amor en la gerencia pública lo que inspira las acciones que realizan los fiscales como líderes en el Ministerio Público y que de alguna u otra manera permea a los que nos rodean. Es así como funciona una comunidad, un Estado de Derecho, una unión de acciones de quienes la conforman; los fiscales acciones que, si son hechas desde el amor, incitan a la paz y si no lo son, incitan al desorden, al caos.
Contrariamente a lo que muchas veces se afirma, y sabiendo que el fiscal como líder público en su accionar se enfrentara a molinos, serán las emociones las que den sentido y profundidad al ser y hacer. Sin duda, con apoyo del maestro tan mencionado a lo que se infiere de los actores y mi experiencia, el amor si es una emoción porque es un componente biológico del ser humano, muchas veces se confunde con un sentimiento, sin embargo, el amor es más que todo una decisión.
En una de las obras de Saint-Exupéry (2008), el zorro le da una valiosa lección a el principito: “Eres responsable para siempre de lo que has domesticado.” (p.24) El mismo zorro le explica al principito que “domesticar” no es nada más que “crear lazos”. De Don Quijote y sus amigos, de los actores, de los autores y ahora del Principito, se dilucida que el amor en la gerencia pública del hacer del Fiscal deviene de las relaciones humanas que se basan en crear lazos, en otras palabras, el accionar del fiscal desde el amor se basa en “domesticar” y “ser domesticados”. Los fiscales como líderes públicos son seres naturalmente sociales y a la vez naturalmente amorosos, y al actuar bajo una posición humana se deben hacer responsables, al igual que el principito una vez aprendida su lección se hizo responsable de su rosa, Alonso Quijano al reconocerse más humano, el fiscal al liderar desde el amor en pro de las relaciones que nos unen a los que nos rodean.
Estas reflexiones me hacen apuntar que el amor es una decisión que debe ser tomada día a día por el fiscal como líder, dejando develado mi postura que los sentimientos son cambiantes y posiblemente efímeros, mientras que las emociones por ser parte de nuestra biología, no pueden no ser parte de nosotros. Y si el amor es una emoción no puede no ser parte del ser humano, no ser parte del accionar del fiscal, no obstante, cada funcionario, cada fiscal, es libre y como tal tiene la capacidad de decidir si actuar en consecuencia al amor que forma parte de él o no hacerlo. De allí que cuando el fiscal internalice como expresaron los actores que su accionar es actuar en nombre del Estado y en pro de los derechos del colectivo, ese fiscal para ser líder del amor debe actuar por decisión.
La gerencia publica con visión humanista y el líder del amor solo es posible si el fiscal como persona está capacitado de vivir el amor. El amor mueve al fiscal como líder público a pensar en estrategias, a crecer, a buscar nuevos horizontes y fines; es el amor lo que inspira a dar la vida por el otro, a ayudar al que lo necesita, a donar nuestro tiempo, nuestros talentos, nuestra libertad. Si el amor es el origen del actuar inteligente del hombre, tal como plantea Maturana, sólo viviendo el amor es posible hacer “lo correcto”, actuar de forma justa, cumplir las leyes y las normas, trabajar por el bien social, pensar en el otro, hacer el trabajo con pasión y responsabilidad; sólo viviendo el amor el ser humano es capaz de ser auténticamente lo que es.
En fin, el equilibrio de las acciones del fiscal hombres se basa en actuar desde la naturaleza, definitiva y biológicamente amorosa, y en la decisión libre de hacer aquello que somos capaces de hacer intrínsecamente, escogiendo hacerlo desde la responsabilidad y el amor; solo así, el ser humano puede vivir siendo lo que verdaderamente es.
Reflexión
Lo que me lleva a interpretar desde un proceso hermenéutico la interacción comunicacional, considerando los puntos intersubjetivos del hombre y ver la realidad desde la mirada del justiciable, lo que me hacer entender que la gerencia pública en relación a la justicia humanista se basa en un servicio público, donde el Estado como forma política se sustenta en derechos, los cuales serán el reflejo del accionar del gerente público.
La gerencia pública y la justicia humanista solo es posible si los servidores de justicia como personas están capacitado de vivir el amor. El amor estremece al gerente público y lo hace prepararse para ser líder público que piensa r en estrategias, a crecer, a buscar nuevos horizontes y fines; es el amor lo que inspira a dar la vida por el otro, a ayudar al que lo necesita, a donar nuestro tiempo, nuestros talentos, nuestra libertad. Si el amor es el origen del actuar inteligente del hombre, tal como plantea Maturana, sólo viviendo el amor es posible hacer “lo correcto”, actuar de forma justa, cumplir las leyes y las normas, trabajar por el bien social, pensar en el otro, hacer el trabajo con pasión y responsabilidad; sólo viviendo el amor el ser humano es capaz de ser auténticamente lo que es.
Es decir que la gerencia envuelve el elemento humano que se representa en el liderazgo que dirige los recursos inteligentes de la organización hacia el logro de y como arte de pensar es para intuir la realidad a fin de enrumbar estratégicamente a la organización con mira a los modelos de gestión pública como la Gerencia Territorial y la nueva Gestión pública, donde se preocupan por mejorar la eficiencia y eficacia de los servicios públicos, incluida la impartición de justicia.
REFERENCIAS
Cervantes Saavedra, Miguel de, 1983, Don Quijote de la Mancha, edición y notas de Celina Sabor de Cortázar c Isaías Lerner, Buenos Aires, Huemul
Chatham HousePublishers Introducción y Cap.I. Disponible: file:///C:/Users/Rafael/OneDrive/Escritorio/GERENCIA%20PUBLICA%20ENSAYO/la-gerencia-publica-como-arte-ciencia-y-profesion-u_compress.pdf Consulta: 2022, enero].
Contreras, S; Miranda, A. (2018) Don Quijote y su visión de la justicia y el derecho. A propósito de los consejos para el gobierno de la ínsula Barataria. Revista CES Derecho,
Córdova J. (2010). Los modelos de administración pública y espacios de participación ciudadana en Venezuela en Reflexión Política, Bucaramanga,Colombia.
Lynn, L (1996). La gerencia pública como arte, ciencia y profesiónNew Jersey:
Maturana, H. (1998) Biología del Emocionar y Alba Emoting. Dolmes Ediciones. Santiago de Chile. Chile.
Rosero M, y Valcárcel M (2012) Liderazgo Transformacional y Gerencia Humanista Bogotá 2012.
RAE. (16). Real Academia Española. Obtenido de Diccionario de la lengua española
[1] https://orcid.org/0000-0002-0208-0134
Directora de Postgrado de la Universidad Yacambu (Venezuela), Co-fundadora de Cata Jurídica con Tacones @catajuridicacontacones, LinkedIn: @Maria Alejandra Mancebo. Correo: malalamarialejandra18@gmail.com