Revista Iberoamericana de Derecho, Cultura y Ambiente
RIDCA - Edición Nº4 - Derechos Culturales
María de los Ángeles Berretino. Directora
20 de diciembre de 2023
Una mirada a la neolengua basada en el translenguaje performativo en la gerencia pública transcompleja. Desde lo crítico a una realidad transformadora
Autora. María Alejandra Mancebo. Venezuela
Por María Alejandra Mancebo[1]
Sean cuales sean las palabras que usamos, deberían ser usadas con cuidado porque la gente que las escucha serán influenciadas para bien o para mal. – Buda
A Modo de Preludio:
El humanismo no antropocéntrico y el translenguaje performativo
El humanismo no antropocéntrico como postura, es una necesidad en la gerencia pública, en el liderazgo y en quien lo acciona, pues la gerencia pública acorde a varios autores es la que; escribe el estudio y la práctica de hacer que funcione un gobierno
Ante lo señalado es propicio mencionar a Garson y Overman (1983) quienes la definen:
El estudio interdisciplinario de los aspectos genéricos de la administración… una mezcla de planificación, organización y control de las funciones de la administración con la administración efectiva de recursos humanos, financieros, físicos, informáticos y políticos” (p. 278
En esa línea cualquier organización pública, cuya esencia radica en garantizar derechos y garantías del ciudadano, debe, desde la postura de la autora, humanizarse desde adentro, conocerse y aceptarse el líder público para reconocer a otros y no seguir en la fachada de proclamar un ente con base humanista no antropocéntrico con principios y valores, sin percibir su esencia: el hombre que está en la institución púbica, el líder público. Lograr esta afirmación es parte de un Humanismo integral, donde el hombre se reconoce asimismo y a todo ser vivo por medio del lenguaje humano y tecnológico, en pro de que el gerente público se reencuentre con su naturaleza y pueda desde el amor y la espiritualidad comunicarse y así liderar
Reflexión empírica ontológica del vacío cognitivo epistémico de la neolengua basada en el translenguaje performativo en la gerencia transcompleja
El concepto de acción comunicativa publicado en el año 1987, es una de los aportes dados por el filósofo alemán Jürgen Habermas para estructurar su Teoría Crítica de la modernidad. En ella plasma cómo la interacción social del ser humano pasa de estar fundada en ritos y en lo sagrado a la potencia del signo lingüístico, con la fuerza racional de las verdades sometidas a crítica.
La Teoría de la Acción Comunicativa busca atender con rigor y claridad conceptual tres (3) propósitos fundamentales: a) desarrollar un concepto de racionalidad capaz de liberarse de las hipótesis subjetivas e individualistas que han apresado a la filosofía y a la teoría sobre la sociedad moderna; b) construir un concepto de sociedad en dos niveles que articule en un solo cuerpo los modelos de sistemas y mundo de vida; c) proponer una teoría crítica de la sociedad bajo los parámetros de la modernidad, que devele sus fortalezas y debilidades y que plantee alternativas. (Franco y Ochoa 1997, p. 49-50).
En este sentido, un aspecto considerado por Habermas (2001) es la racionalidad la que según él está relacionada más al hacer de los sujetos capaces de lenguaje y acción donde expresan un saber. Representa un cambio de paradigma, la concepción Habermasiana ya que se trata de la transformación de la razón. Es decir, se establece la racionalidad como la capacidad del actor de conocer y actuar o como la capacidad interactiva entre la cognición y la acción.
A este paradigma se suma un aspecto que le da un giro como es el hecho de considerar el lenguaje; expresado este en actos de habla, que representa un medio vinculante en la coordinación de la acción de los sujetos, este último como expresa Franco y Ochoa (ob.cit.), “A través de la argumentación racional, donde las disputas de interés son resultas por medio del mejor argumento y por la búsqueda del consenso.”(p.55). La argumentación lleva implícito un saber, al ser expuestos y contrastado se optar por el más poderoso para cada situación. Así, el gerente abre espacios para la participación y el éxito organizacional.
En el mismo orden de ideas, la acción (desempeño) constituye una característica sociológica básica que junto a otras forma redes conceptuales. La acción está relacionada con todo el quehacer humano. La misma se define por cierto número de características principales: su carácter social, su búsqueda y realización de relaciones de sentido, “la conexión entre aspectos informales y energéticos del habla y la intervención de esta en el mundo objetivo y su carácter cultural ligado a su historicidad” (Strmiska, 1989, p. 39).
En este sentido, la acción es necesariamente una interacción social por el simple hecho de basarse en la utilización de la lengua, obra colectiva por excelencia, para orientar la acción y para regular su realización. Por su parte Habermas (ob.cit) la define como “las manifestaciones simbólicas en que los actores entran en relación con el mundo de manera significativa” (p.55). La multitud de conceptos de acción según el autor pueden reducirse a cuatro (4) conceptos básicos (p.125-131).
En primer lugar; concepto de acción teleológica; en ella el actor realiza un fin o hace que se prodúzcale estado de cosas deseado eligiendo en una situación dada los medios más congruentes y explicándolos de manera la más adecuada. La acción teleológica se amplia y convierte en estratégica cuando en el cálculo de los que el agente hace de su éxito interviene la expectativa de decisiones de lo menos otro agente que también actúa con vistas a la realización de sus propios propósitos.
El concepto de acción regulada por normas se refiere no al comportamiento de un actor en principio solitario que se topa en su entorno con otros actores, sino a los miembros de un grupo social que orientan su acción por valores comunes. Las normas expresan un acuerdo existente en un grupo social. La observancia de una norma significa el cumplimiento de una expectativa generalizada de comportamiento, la cual no tiene sentido cognitivo de expectativa de un suceso predecible, sino el sentido normativo de que los integrantes del grupo tienen derecho a esperar un determinado comportamiento siendo este el que subyace en la teoría del rol social.
La acción dramatúrgica; no hace referencia primariamente ni a un actor solitario ni al miembro de un grupo social, sino a participantes en una interacción que constituye los unos para los otros públicos ante el cual se ponen a sí mismos en escena. El concepto central aquí es el de auto-escenificación, significa, por tanto no un comportamiento expresivo espontáneo, sino una estilización de la expresión de las propias vivencias, hechas con vistas a los espectadores.
Andamio argumentativo de una nueva episteme teórica de la neolengua basada en el translenguaje performativo en la gerencia transcompleja
Por ello, vale la afirmación de Maturana (2007) para quien “todos los seres vivimos inmersos en el leguaje, suma a ello que “el lenguaje tiene que ver con el hacer, el lenguaje no es un ámbito abstracto, todo lo que los seres humanos hacemos ocurre en el lenguaje” (p.13). Por ello, al llegar al ámbito organizacional público constituye el elemento que hace posible su existencia. En este sentido, Echeverría (1994) sostiene “el lenguaje es generativo, estamos sosteniendo que es acción. A través del él no sólo hablamos de las cosas, sino que alteramos el curso espontáneo de los acontecimientos: hacemos que cosas ocurran” (P.24). Para que esto sea así debe mediar un elemento más y ese es el entendimiento que se basa en convicciones comunes.
Desde esta mirada, Balza (2020), tributa que:
Es necesario dejar claro, que la substancia sapiente que nutre a la transcomplejidad como visión transparadigmática para abordar la trama de la vida del ser humano, proviene del pensamiento complejo, la transdisciplinariedad y la lógica del tercer incluido, no solamente como una cosmovisión pensisentida en el borde de lo vivencial, experiencial, conciencial y espiritual, sino como una profunda mirada que asegura y fortalece la indisoluble unidad del conocimiento que germina de un dialogo fecundo entre lo humano y lo divino (p. 13).
Tal afirmación, accede arrogarse en la esfera epistémica, que el ser humano por ser inconcluso, le permite ir develando conocimientos, acaecimientos distintos que le permitan convivir con él y con el otro, así como todo ser vivo a fin de estar apto para liderar las organizaciones públicas, de allí la importancia del uso adecuado de las palabras y como se comunican
Por otro lado, en el hacer organizacional el hombre es lenguaje, es acción. Llamare acción al desempeño ya que con su trabajo el gerente busca impactar la realidad orientándola al logro de objetivos. En consecuencia, lo que el gerente hace y los roles que asume es desempeño, esa labor, pero también es lenguaje y tiene que ver con que el hacer en conjunto tiene un carácter social que orienta la búsqueda y construcción de relaciones con sentido.
Ahora bien, la neolengua basada en el translenguaje performativo en la gerencia organizacional transcompleja es un tema complejo que involucra varios conceptos y teorías. En primer lugar, es importante definir qué es la neolengua. Según George Oswell, la neolengua es un lenguaje creado por el poder para controlar el pensamiento y la acción de las personas. En este sentido, la neolengua es una herramienta de manipulación y control social.
Por otro lado, el translenguaje performativo es una teoría que sostiene que el lenguaje no solo describe la realidad, sino que también lo crea. Es decir, el lenguaje no es solo un medio de comunicación, sino que también es una herramienta para transformar la realidad.
En este sentido, el translenguaje performativo es una herramienta para la acción y la transformación social. La gerencia pública organizacional Transcompleja, por su parte, es una teoría que sostiene que las organizaciones son sistemas complejos que interactúan con su entorno de manera dinámica y no lineal.
Es por ello que se puede afirmar, que la gerencia pública organizacional Transcompleja es una herramienta para la gestión de la complejidad y la incertidumbre en las organizaciones. La combinación de estos tres conceptos da lugar a la neolengua basada en el translenguaje performativo en la gerencia organizacional transcompleja. Esta neolengua es una herramienta para la gestión de la complejidad y la incertidumbre en las organizaciones, pero también es una herramienta de manipulación y control social.
Esta puede tener efectos positivos y negativos. Por un lado, el uso de la neolengua puede ayudar a las organizaciones a gestionar la complejidad y la incertidumbre de manera más efectiva. Al utilizar un lenguaje que crea realidad, las organizaciones pueden transformar su entorno y adaptarse a los cambios de manera más rápida y eficiente. Por otro lado, el uso de esta neolengua también manipula y controla la sociedad, al controlar el pensamiento y la acción de las personas, las organizaciones pueden limitar la libertad y la autonomía de sus miembros.
La gerencia publica con visión humanista integral, el líder del amor y espiritual soportado en la comunicación solo es posible si el líder público como persona está capacitado de vivir el amor y lo divino. El amor y la espiritualidad mueve al gerente a pensar en estrategias para el colectivo, a crecer, a buscar nuevos horizontes y fines; es el amor y lo divino lo que inspira a dar la vida por el otro, ya el cómo individualidad se aceptó y consocio, y ahora puede ayudar al que lo necesita, a donar su, talentos y libertad, y ello se logra con el lenguaje la comunicación asertiva Si el amor es el origen del actuar inteligente del hombre, tal como plantea Maturana, es o viviendo desde el amor que permea lo espiritual, que es posible hacer “lo correcto”, actuar de forma justa, cumplir las leyes y las normas pero actuando con valentía si estas no son justa saber desaplicarlas para dar paso a su correctivo la equidad y, trabajar por el bien social, pensar en el otro, hacer el trabajo con pasión y responsabilidad; sólo viviendo el amor con reconocimiento de lo espiritual el ser humano es capaz de ser auténticamente lo que es y así gerenciar bajo una mirada Transmoderna, apoyado la palabra que transforma
Reflexión Recapitulaciones y mucho más
En conclusión, la figura de la translengua tiene que ver con una visión flexible que fomenta no solamente la comunicación sino las estrategias, es decir, que estamos hablando de un lenguaje que transforma. Donde los problemas se deben visualizar desde un nuevo plano más complejo, que nos permita verificar cuál es el problema y de donde deriva.
Mirar al líder del amor y espiritual en la gerencia pública desde la neolengua basada en el translenguaje performativo en la gerencia transcompleja es aquella donde el líder se comunica de manera asertiva, respeta, valora y cuida a sus colaboradores y viceversa; aquella donde el servicio a prestar para conseguir justicia es lo más importante para todos; aquella donde defender la vida de los seres humanos y sus derechos es el principal interés; ello es gerenciar desde el verdadero amor a través del líder que entiende que las palabras transforman.
Para lograr experimentar una gerencia cada vez más humanista se debe dejar a un lado las creencias del falso poder dado por la ley, uno que se ejerce sin compasión y que mantiene la administración pública llena de tiranos sin corazón Sin duda, el amor como emoción rige cada relación cuando somos capaces de ser valientes y tomar la decisión de actuar con amor, humanizando la gestión que representa el hombre y merece ser gerenciado por hombre de amor que saber comunicarse
A su vez nos queda claro que no es inventar una nueva palabra, es el nuevo uso de la misma. Entonces en una organización transcompleja que permea el lenguaje tecnológico, como el lenguaje humano, que tiene que ver de manera transversal con el liderazgo y con la forma de que el gerente se realiza en la toma de decisiones y en cómo se comunica, entonces hablamos de una forma de transformar. Esa nueva forma de transformar tiene que ver con nuevos lenguajes, es decir, estamos en presencia de redes semióticas que tienen que hablar de dispositivos cognitivos, a su vez se debe abordar el campo tecnológico, en donde la comunicación debe ser asertiva y debe estar intercomunicada. En fin, una organización transcompleja performativa, donde el trabajo performativo que tiene el impacto transformador genera una circulación donde existe un dialogo por mediaciones discursivas con una cultura organizacional, donde la gerencia maneje el lenguaje en todo su extensión.
Referencias
Balza, A y Schavino, N (2020). El umbral de las Transciencias Sociales. Un debate necesario desde la Transcomplejidad. Ediciones Feredit, San Joaquín de Turmero, Venezuela.
Echeverría, R (1994). Ontología del Lenguaje. Ediciones Dolmen S.A
Franco, N. y Ochoa, L. (1997). La Racionalidad de la Acción en la evaluación. Un Análisis Crítico desde la Teoría de la a acción comunicativa. Editorial Mesa Redonda Magisterio. Colombia.
Garson y Overman (1983) ¿Por qué gerencia pública?: mitos y realidades XI Congreso Internacional del CLAD sobre la Reforma del Estado y de la Administración Pública, Ciudad de Guatemala, 7 – 10
Habermas, J. (2001). Teoría de la Acción Comunicativa I. Racionalidad de la acción y racionalización social. Edit. Taurus. España
Maturana, H.(2007).Amor y Juego. Fundamentos Olvidados de lo Humano. Editorial Dolmes. Chile.
Strmiska, Z. (1989). Teoría de la Acción y Status de los Actores. (Proyecto de Análisis)
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